EFEMÉRIDES 10 DE NOVIEMBRE

1778:  Nace en Jujuy el doctor Teodoro Sánchez de Bustamante. Se graduó de doctor en leyes en 1804. Fue representante de su provincia natal ante el Congreso que se reunió en Tucumán y fue uno de los firmantes del Acta de la Independencia, el 9 de julio de 1816. Fue gobernador de Jujuy entre julio de 1826 y febrero de 1827. Murió en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, el 11 de mayo de 1851.

1834:  Nace en San Martín, Buenos Aires, José Hernández, autor de Martín Fierro. Fue periodista y funcionario en la gestión pública. Ocupó un cargo en el Concejo Nacional de Educación y fue concejero del Banco Hipotecario Nacional. Entre sus obras figuran Vida del Chacho, Instrucción del estanciero y la Vuelta de Martín Fierro. Murió el 21 de octubre de 1886. Se conmemora en esta fecha el día de la tradición.

1836:  Nace en Arrecifes, Buenos Aires, el doctor Ricardo Gutiérrez. Médico y poeta, fue uno de los fundadores del Hospital de Niños, donde se desempeño gratuitamente durante veinticinco años. Participa en la guerra contra el Paraguay. Entre sus poesías figuran El poeta y el soldado y El misionero. Entre sus obras también figuran Fiebre Salvaje, Lázaro, el Libro de las Lágrimas y el Libro de los Cantos. Murió en Buenos Aires el 23 de septiembre de 1896.

1859:  Se concluye la redacción del Pacto de San José de Flores que conducirla a la unión de todas las provincias. Seria ratificado el día 11 de noviembre.

1910 - Nace en Buenos Aires el destacado novelista, cuentista y crítico de arte Manuel Mújica Láinez, uno de los grandes escritores de la literatura Argentina contemporánea y autor, entre otras obras, de "Misteriosa Buenos Aires" (cuentos), "La casa"(novela); "Vida de Aniceto el Gallo" y "Los ídolos". Murió en su residencia serrana de "El Paraíso", en Cruz Chica (provincia de Córdoba) el 21 de abril de 1984.

1925:  Jorge Ernesto Pérez Millón Temperley muere en el hospicio de Vieytes tras recibir un disparo el día anterior. Era miembro de la Liga Patriótica Argentina y había asesinado al anarquista Kurt Wilckens haciéndose pasar por guardia de la Penitenciara Nacional para vengar a Beningo Varela, a quien Wilckens había asesinado. Wilckens, a su vez, había asesinado a Varela en venganza por los fusilamientos de los obreros patagónicos.