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jueves, 21 de junio de 2012

HISTORIA DEL TEATRO RIOJANO



El teatro riojano tiene su origen en las actividades escénicas mas populares como fueron en su momento las presentaciones de circo y los radioteatros, aunque se cuentan  en su inicio aislados intentos dramatúrgicos como el de Peregrina Ozán y su “Bruja Clara de Salamanca” durante la década del ’30.
Luego merece recordarse un movimiento artístico que allá por los años ’50, tuvo su centro en el tradicional barrio San Vicente. La embajada artística R.A.D.A.R (Revista Artística Divulgadora del Arte Riojano) que nucleaba a recitadores, músicos, cantores y actores bajo el esfuerzo y el esfuerzo de su creador José Dalmacio Córdoba. El grupo teatral R.A.D.A.R actuaba en parques de diversiones ambulantes o en circos – cuyos escenarios les prestaban en días de descanso – comiquísimas historias    que hacían las delicias de un público receptivo y tumultuoso. Este grupo llegó a representar, bajo la supervisión de Celia Edith Huniken de Pelliza algunas de sus graciosas piezas cortas.
Este tipo de representaciónes cuyos padres eran la radio y el folletín, pudo convivir con la obra desplegada por el C.R.A.E (Centro Riojano de Arte Escénica) creado por Víctor María Cáceres y Jorge Castellanos en 1946. El estreno por este grupo de “La Vuelta al Nido” de Víctor María Cáceres, significó un verdadero acontecimiento, que marcó el inicio de una actividad fecunda para el teatro en La Rioja y que duró hasta la muerte de Cáceres.
Dramaturgo, además de actor y director, toda su obra posee una explícita carga dramática que la sitúa por momentos en el melodrama, componente que lo emparenta con un teatro popular, elemento predominante en casi todo el teatro nacional desde principios del Siglo XX.
En 1960 se radica en nuestra ciudad, proveniente de Córdoba, José Alberto Santiago: dramaturgo, actor y director. Bajo su dirección surge el Seminario Experimental de Teatro, que se forma con un elenco estable y una escuela, dependientes de la Dirección de Cultura. Así es como comienza a aparecer en el medio teatral riojano el actor “instrospectivo”, “satanyslavskiano” en el llamado “teatro culto” en oposición al “teatro popular”.
Al Seminario Experimental le sucederá, allá por 1965, el Teatro Oficial de la Provincia, a cargo de Ubaldo Nicchi, quién continúa la línea estética de Santiago.
En el año 1967 por iniciativa de Carmen Agüero Vera, Directora de Cultura Provincial, surge el elenco de la Comedia Riojana, que alcanzó ya más de cuarenta años de labor, solo interrumpida por el oscurantismo de la dictadura militar. El elenco de la Comedia debuta en 1968, con el estreno de “La Zapatera Prodigiosa” de García Lorca, bajo la dirección de María Teresa Montero de la Vega y la supervisión general de Adelaida de Castagnino.
En esta obra debuta China Díaz, quién casi sin interrupciones y hasta hoy, forman parte de dicho elenco.
En el año 1969 inicia su importante trayectoria dentro del teatro riojano, el actor y editor Ariel Keller, quién pone en escena “La Zorra y las Uvas” de Figuereido, estando el rol protagónico a cargo de Edgardo Gordillo. Además de dirigir, Keller dictó cursos para el Seminario de Arte Dramático dependiente del elenco oficial, junto con charlas y conferencias sobre el teatro nacional.
En el año 1971, luego de cumplir con una beca para perfeccionarse en dirección teatral en el Teatro Nacional Cervantes de Bs. As, toma la dirección de la Comedia Edgardo Gordillo. Dirigió este elenco durante 20 años, y su estilo teatral se basó en el psicologismo: el actor tendiendo hacia una expresión externa como resultado del trabajo psíquico, del contenido interior. Gordillo fue formado por maestros que abrazaban las técnicas de Strassberg y Stanilavsky.
Su lucha estuvo centrada en insuflar en sus actores la verdad de los sentimientos y en la exteriorización de los conflictos. Incursionó en la comedia y en la tragedia, buscando siempre en sus puestas la verosimilitud realista.
En el año 1978, en un gesto de desprecio visceral  y avasallamiento del hecho artístico, el gobierno de facto de la provincia, hizo “desaparecer” al único elenco artístico oficial de aquel entonces.
El 12 de Octubre de 1989, un decreto del Ejecutivo Provincial y durante la gestión al frente de la Secretaría de Cultura. Su reapertura se debió también a un proyecto de Ley previamente elaborado durante la gestión del escritor Héctor David Gatica al frente de la Dirección de Cultura.
La Comedia de la Provincia se rige actualmente por el texto de la Ley 5.034, tal que determina, entre otras cosas, que sus integrantes ingresarán por concurso de oposición y antecedentes y con permanencia de dos años en sus funciones.
En el año 1994 y siendo Secretaria de Cultura  la Prof. Ana Lía Martín de Fuenzalida; se llamó a concurso de antecedentes para cubrir el cargo de Director de la Comedia de la Provincia, siendo ganado el mismo por el actor, director y dramaturgo César Torres, quién ocupa ese cargo hasta la actualidad.
César Torres procuró incorporar a la Comedia, nuevas tendencias y estilos para sus puestas, con la elección de un repertorio que posibilite distintos niveles de lectura, para que nadie quede “afuera” en la decodificación de los signos teatrales. Colocó el acento en los espectáculos para niños  jóvenes, consciente de su formación como espectadores y multiplicó las puestas para espacios no convencionales, buscando sacar al teatro del escenario tradicional. Intentó extraer de sus actores un trabajo orgánico, hurgando en su creatividad y motivándola, siendo el origen de muchas de sus puestas. Trabajó más sobre la acción física y la gestualidad a fin de conseguir homólogos de los personajes.
Entre muchas obras destacadas, podemos recordar “El Familiar” escrito por el mismo César Torres que ganó el Festival Provincial en 1997 y representó a La Rioja en el Festival Nacional, “Salón Balumba” que se inició como creación colectiva de los actores, “Aquí llegan los Anselmi” también de César Torres, “Jetattore” que fue presentada en el Teatro Cervantes de Buenos Aires, “Don Fabián” de Víctor María Cáceres, “Las Muertes de Pedro Berón” adaptación del cuento homónimo de Héctor David Gatica, entre muchas otras obras.
En el año 1981, y en un desolado panorama teatral todavía bajo el Gobierno Militar, surge el elenco de la Asociación Folklórica Riojana, bajo la dirección de Manuel Chiesa. En el año 1983 este elenco fue absorbido en su totalidad por la Secretaría de Gobierno y Cultura de la Municipalidad de La Rioja, pasando a constituir el T.E.M. (Teatro Estable Municipal).
Luego de muchas destacadas presentaciones durante sus doce primeros años, la obra “El Bumbúm” escrita por el propio Manuel Chiesa, obtuvo el premio Nacional de Teatro  en 1995, basado en un cuento de Celia Agüero Vera. Fue en esa obra donde se consolida todo el trabajo, la estética y el objetivo comunicacional del T.E.M., presentes en cada una de las piezas puestas durante estos años: la hibridez entre cultura popular y selecta, el “feísmo” como elemento revulsivo, el melodrama, la tragedia, las palabras en conflicto con la imagen, imponiéndose casi siempre esta última. También la marginación, la rebelión, la emoción.
Según la opinión de César Torres, durante muchos años “la labor de dichos elencos se estanca por que si bien al teatro lo hacemos actores y directores, sin una producción solvente, sin una infraestructura técnica mínima, sin difusión, en fin, sin objetivos para el teatro, este renguea”.
La vigencia de la Ley Nacional 24.800 (La Ley Nacional del Teatro) promulgada el 23 de abril de 1997, mediante el cual el estado reconoce que la actividad teatral, por su contribución al afianzamiento de la cultura debe ser objeto de promoción y apoyo, lo cual significó un apoyo para los esfuerzos independientes. Así fue como se creo el Instituto Nacional del Teatro, con delegaciones en todas las provincias del país.
En Asamblea de teatristas, fue elegida para ejercer la función de representante federal de este Instituto  para nuestra provincia, la señora Ana Lía Martín de Fuenzalida.
A fines de los ’90 recibieron subsidios a fin de producir sus espectáculos, diversos grupos independientes, como “Arlequín” fundado en 1973 por Edgardo Gordillo y Edgardo Nicchi, “Macondo” fundado por César Torres en 1993, “El Grupo” fundado por Miguel Díaz en 1995, “La Grulla” surgido en 1970 como extra clase del Colegio Provincial Nº 1, cuya primera directora fue Olga Santochi de Paredes, “Kamar” fundado por Daniel Acuña Pinto en 1998 y con un estilo orientado al teatro antropológico más despojado de elementos.
Comentaba César Torres en 1999 que “el teatro está vivo y la esperanza de crecer  es cada vez mayor” y remarcaba que era necesario hacer un teatro más actualizado en cuanto a estilo artístico, ya que “Hay profundizaciones de los viejos métodos, saltos cualitativos hacia la diversidad y la síntesis, entre lo viejo y lo nuevo”.
En el lapso ya transcurrido del actual Siglo XXI (2000-2012)la actividad siguió incrementándose en La Rioja, con la aparición de nuevos grupos teatrales, tales como el “Manuel Chiesa” de Miguel Saldaño, la “Academia Universo Fosse” dirigida por Marco Mercado Arias que se destaca en la realización de musicales y además funciona como escuela independiente de teatro, el  grupo teatral “Caja Negra” que funciona junto a la también escuela teatral “El Puente”, el grupo independiente “Bohemia” bajo la dirección de Alejandro Olivera.
Y no deja de ser significativa y de gran impulso para el teatro de nuestra provincia, la aparición de la carrera teatral en el Institudo Superior de Formación en Docencia de Arte y Comunicación Alberto Crulcich, en donde a fines de los ’90 surge la carrera de Actor Teatral, que durante la década de 2000 se convierte en Profesorado en Teatro, formando así una nueva camada de actores además de futuros docentes de teatro que de a poco se están insertando en las escuelas públicas y privadas de nuestra provincia.  
La Argentina es considerada actualmente el país con mayor cantidad de producciones teatrales en el mundo, y por suerte para los riojanos; La Rioja está formando parte - cada vez con mayor presencia de actividades y especialistas capacitados - de esta nueva etapa de la  renovación  artística en nuestro país que significa el crecimiento continuo, en cantidad y calidad, de nuestro teatro.


Bibliografía Consultada: “Panorama del Teatro en La Rioja Capital” (1999) de César Torres incluido en “Integración Cultural Riojana” (2001) de Héctor David Gatica.

Síntesis y agregados: Lic. Pablo Esteban Gatica



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